En julio de 2016 se estrenó en Estados Unidos la serie de televisión de género fantástico y de terror Stranger Things, escrita y dirigida por los hermanos Matt y Ross Duffer, y que recibió muy buenas críticas y tuvo un gran éxito de público. Con un claro homenaje al cine de Hollywood de la década de 1980, con referencias a películas tan míticas como E.T. el extraterrestre, Los Goonies, Alien, Encuentros en la tercera fase, El resplandor, Cuenta conmigo..., la primera temporada contó con 7 capítulos, que narran la historia de un grupo de niños en el condado de Hawkins de Indiana durante los años 80, donde un chico de 12 años desaparece misteriosamente. Al mismo tiempo, una niña con poderes telequinéticos intentará ayudar a los amigos del chico en su intento de encontrarlo. La serie renovó para una segunda temporada, que se estrenará el próximo 27 de octubre, y que según los creadores, los hermanos Duffer, contará con una criatura inspirada en los Mitos de Cthulhu de Lovecraft, como podéis leer aquí.
Ahora bien, ya en la primera temporada pudimos encontrar algunas referencias indirectas al universo de Lovecraft. En la serie, unos experimentos científicos en el Laboratorio Nacional de Hawkins logran abrir un portal a otra dimensión, de donde escapa una criatura terrible, denominada el Demogorgon, que es la que secuestra al niño de 12 años al que sus amigos tratarán de encontrar. Como bien sabéis, la obra entera de Lovecraft se basa en seres alienígenas o seres extradimensionales, habitantes de dimensiones paralelas, de otros mundos, que penetran ocasionalmente en el nuestro cuando pueden para atormentar al ser humano, lo que recuerda mucho al Demogorgon de Stranger Things. En otro capítulo, la madre del niño desaparecido, interpretada por Winona Ryder, trata de comunicarse con su hijo, al que no ve pero sabe que sigue en su casa, pero en otra dimensión, lo que recuerda al relato Los sueños de la casa de la bruja, en el que la bruja Keziah Mason entraba y salía a voluntad de una dimensión paralela a través de un ángulo de la habitación de su vieja casa. Y si hay un relato lovecraftiano que puede haber influido en Stranger Things, ese es Desde el más allá, en el que un científico ha conseguido ver a seres de otra dimensión paralela a la nuestra, mediante la estimulación de la glándula pineal. Pero el problema es que ahora, esos seres, invisibles en nuestra dimensión, lo han visto a él, algo que también ocurre en la serie con el Demogorgon. De hecho, hay una cita del relato mencionado que se relaciona bastante con el argumento de la serie de televisión:
Mírame, escucha lo que digo, ¿crees que hay realmente cosas como el tiempo y la magnitud? ¿Te apetece que haya cosas como la forma o la materia? ¡Te digo, he golpeado profundidades que tu pequeño cerebro no puede imaginar! He visto más allá de los límites del infinito y atraído demonios de las estrellas. . . . He aprovechado las sombras que pasan de un mundo a otro para sembrar la muerte y la locura. . . . El espacio me pertenece, ¿me oyes? Las cosas me están cazando ahora, las cosas que devoran y disuelven, pero sé cómo escapar de ellas.
Mírame, escucha lo que digo, ¿crees que hay realmente cosas como el tiempo y la magnitud? ¿Te apetece que haya cosas como la forma o la materia? ¡Te digo, he golpeado profundidades que tu pequeño cerebro no puede imaginar! He visto más allá de los límites del infinito y atraído demonios de las estrellas. . . . He aprovechado las sombras que pasan de un mundo a otro para sembrar la muerte y la locura. . . . El espacio me pertenece, ¿me oyes? Las cosas me están cazando ahora, las cosas que devoran y disuelven, pero sé cómo escapar de ellas.
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