EL HORROR GRECORROMANO Y SU RECEPCIÓN MODERNA

Este 2025 se ha publicado un ensayo titulado Graeco-roman horror and its modern reception (El horror grecorromano y su recepción moderna), publicado por la editorial británica Routledge Press. Se trata de una obra de 286 páginas editada por Isidro Molina Zorrilla, Nuno Simoes Rodrigues y Vasileios Balaskas, que aborda una nueva exploración de la literatura clásica, examinando su compromiso con la tragedia personal o colectiva, los acontecimientos horribles y los episodios que infligen miedo. Explora las diferentes formas en que el miedo, el terror y el horror se han manifestado en la cultura greco-romana y su recepción. El ensayo contiene un capítulo sobre Lovecraft que concluye con un estudio de caso de recepción clásica en el ámbito del horror cósmico de Lovecraft y la deidad hermética Yog-Sothoth, examinando cómo el concepto de la Hermética y el motivo posterior del Velo de Isis, una vez asociado con el consuelo después de la muerte, se reinterpretan en tradiciones posteriores. Según estas tradiciones, descubrir la verdadera naturaleza de la realidad es una experiencia aterradora. El capítulo argumenta que Lovecraft hereda esta tradición pero hace un cambio más ambiguo al hermetismo, proporcionando connotaciones positivas a la experiencia iniciática. Este capítulo también afirma que el uso que Lovecraft hace del hermetismo se encuentra en el núcleo de parte de su conceptualización del horror cósmico.

DETECTIVE LOVECRAFT

Del 7 al 24 de enero de 2026, tendrá lugar en el Au Rikiki Café Teatro de Lyon (Francia), un evento llamado Detective Lovecraft, una obra de teatro de Cocotte Compagnie , rodada íntegramente en blanco y negro, una mezcla de suspense y comedia absurda. Sumérgete en la Nueva York de 1943 con Howard Phillips Lovecraft , un detective contratado por Verónica para encontrar a su marido y un legendario libro ocultista, el Necronomicon. Una comedia criminal en blanco y negro que mezcla suspenso, comedia absurda y fantasía.

GRAFITTI LOVECRAFTIANO EN MÁLAGA

A través de una cuenta de Instagram descubrimos que en el muro de una calle de la ciudad española de Málaga, en una ubicación desconocida, existe un graffiti realizado en 2019 a todo color que tiene cierta influencia lovecraftiana. Vemos a un hombre borracho con aspecto de mendigo (¿tal vez el viejo Zadok Allen de La sombra sobre Innsmouth?), tumbado en un banco con varios tentáculos que asoman por detrás, como si fuera una criatura de Lovecraft la que le acechara.

DYER EXPEDITION

En septiembre de 2025 se lanzó al mercado un videojuego independiente titulado Dyer Expedition, creado por el estudio australiano Monkeys with Jobs. Se trata de un juego de aventuras de puzzles inspirado en el relato de Lovecraft En las montañas de la locura, ambientado en 1931, en el que seguimos los pasos de una expedición organizada por la Universidad Miskatonic de Massachusetts, liderada por el profesor William Dyer. El objetivo inicial parece sencillo: viajar al continente antártico para excavar fósiles y recopilar datos que respalden teorías científicas revolucionarias. Pero, como era de esperar en un título inspirado en Lovecraft, las cosas se complican rápidamente. La expedición pierde contacto con el mundo exterior después de que su barco de suministros regrese a una base casi abandonada, y un sentido de espanto inexplicable comienza a cernirse sobre todo.

PROYECCIÓN DE "LE MONDE DE LOVECRAFT"

El pasado 22 de octubre, tuvo lugar en el Aula Magna de la Facultad de Filosofía y Letra de la Universidad de Zaragoza la proyección del documental francés Le Monde de Lovecraft, de 2023, una película dirigida por Marc Charley, de 120 minutos de duración que explora la obra y el legado de Lovecraft. Al concluir la proyección, se abrió un coloquio con el Profesor Gilles Menegaldo, de la Universidad de Poitiers, uno de los mayores expertos sobre Lovecraft en Francia y guionista de la película.

NADA HUMANO SOBREVIVE AQUÍ

Después de estar en preventa, este mes de noviembre se presenta el libro Nada humano sobrevive aquí, publicado por la editorial peruana Academia Antártica con el subtítulo Antología de horror cósmico del Perú bajo la sombra de Lovecraft. Este libro de 300 páginas no es solo una colección de relatos de terror lovecraftiano ambientados en Perú y escritos por autores peruanos, sino una prueba de cómo se deforman los mitos cuando atraviesan los Andes y de cómo se escribe el horror cuando el abismo no está en las estrellas, sino en la grieta de lo real. La edición incluye también un artículo sobre la mente de Lovecraft, por el psiquiatra Carlos Vera, fragmentos del diario de Lovecraft de 1937 y un dossier sobre la huella de Lovecraft en la cultura contemporánea: publicaciones, cine, música y relecturas en todo el mundo. La edición está a cargo de Alexis Iparraguirre y los autores que colaboran son Cristian Briceño, Abril Cárdenas, Jorge Casilla, Bruno Cueva, Sophia Gómez, Aníbal Mayurí, Poldark Mego, Romina Paredes, Yelinna Pulitti,  Andrea Rivera, Claudia Salazar, Carlos Saldívar y Carlos Vera.

La sinopsis dice así:

Una criatura monstruosa acecha en Barranco y una secta de Cthulhu se instala en Lima. Un ser con cabeza de puma y alas de cóndor somete a un joven historiador en Junín, mientras un agente migratorio enloquece entre susurros oníricos. Esta antología reúne a autoras y autores peruanos que miran a Lovecraft desde los márgenes: no para repetirlo, sino para dislocarlo. Aquí, los dioses malignos se mezclan con los apus, los rituales con el tráfico limeño y lo inhumano no desciende del espacio, sino de cuerpos heridos, desigualdades sociales y sueños atravesados por la violencia. Lejos del homenaje nostálgico, estas ficciones despliegan una relectura crítica del horror lovecraftiano desde los bordes culturales del Perú contemporáneo. 

LOVECRAFT BAR EN SAN PETERSBURGO

En la ciudad rusa de San Petersburgo, la antigua Leningrado de la época soviética, en concreto en la calle Bolshaya Konyushennaya, existe un local llamado Lovecraft Bar, un bar con una cuidada selección de cervezas artesanas, nacionales y de otros países, y en el que se pueden jugar a juegos de mesa. Su nombre, por la ambientación del establecimiento y el logotipo que podemos ver en los posavasos, es un hondo homenaje al escritor de Providence.