En 2007 la editorial británica Manchester University Press sacó a la venta un volumen titulado Monstrous adaptations: Generic and thematic mutations in horror film, esto es, Adaptaciones monstruosas: Mutaciones genéticas y temáticas en el cine de terror, editado por Richard J. Hand y Jay McRoy. Se trata de una obra de 274 páginas que recoge 15 ensayos breves de otros tantos autores y críticos cinematográficos que abordan el concepto de adaptación en relación al cine de terror. La adaptación no es solo una práctica y estrategia cultural clave para los cineastas, sino que también es un tema de gran importancia dentro del cine de terror en su conjunto. La historia del cine de terror está llena de adaptaciones que se han inspirado en la ficción o el folclore, o que han asumido la forma de remakes de películas preexistentes. Sin embargo, el género de terror en sí también abunda en sus propias innumerables transformaciones y transmutaciones. Los ensayos de este volumen se relacionan con una impresionante variedad de textos de terror, desde las primeras películas de terror mudas de Thomas Edison y Jean Epstein hasta importantes fenómenos contemporáneos, como la apropiación occidental de motivos de terror japoneses. Las obras clásicas de Alfred Hitchcock, David Cronenberg y Abel Ferrara reciben un reexamen de vanguardia, al igual que las obras injustamente descuidadas de Mario Bava, Guillermo del Toro y Stan Brakhage. Entre los textos, cabe mencionar uno que lleva por título The
Unfilmable? H. P. Lovecraft and the Cinema o ¿El que no puede filmarse? H.P. Lovecraft y el cine, un texto de Julian Petley, profesor de la Universidad Brunel de Londres, en el que se analiza la tortuosa historia de las adaptaciones al cine de los relatos de Lovecraft, con mención a películas clave como The Haunted Palace (1964), El horror de Dunwich (1970), Reanimator (1985), Necronomicon (1993), En la boca del miedo (1995) y otras tantas cintas de terror.